martes, 2 de octubre de 2007

Maximiliano Peralta Rodrìguez / Posadas




Enfrentarse a un problema espacial, arquitectónico, se trata, en parte, de precisar unas ciertas coordenadas que tienen que ver con lo orgánico mismo, con el modo de trasladarse un cuerpo, lo cual no es solamente el problema abstracto del sitio, sino también el cómo ese espacio resuena en uno como organismo.
Siempre hay situaciones del propio espacio. Trato de buscar que los lugares me indiquen algo de mi propio interés.
La idea de adaptación y el trabajo in situ son centrales en la producción y están vinculadas a mi experiencia de vida, mudanzas (cambios), que implicaron re-adaptarse, preparar la casa y seguir.
Con este dispositivo entonces me dispongo a improvisar y ensayar maneras posibles de vivenciar un espacio-tiempo.

1 comentario:

guadalupe aguiar dijo...

Me alucinó la cocina!
Va a ser un gusto verte

Saludos